Perdonen que escriba en castellano pero temía mal usar las palabras en catalán, hacer errores ortográficos y que el contenido de esta carta se mal entendiera. No confío en los traductores on line y mi català ancara no es molt bo :) agraeixo molt que sigueu un catalitzador d'emocions i espero que la meva contribució ajudi a disminuir la pena que a tots ens arriba directament o indirectament. Gràcies per deixar-me compartir.
Hola Anna,
Son las 12 de la noche del domingo 28 de abril, hoy pasamos un día muy lindo en compañía de tu familia y quería compartir unos pensamientos que al regresar a casa me rondaban por la cabeza.
Siempre había tenido miedo de morir y siempre me había preguntado si es que existe vida después de la muerte...
Desgraciadamente te conocí por muy poco tiempo pero veo el legado que dejaste en el corazón de dos nenas fantásticas a las que quiero mucho y en el hombre que amo y me sorprende que de un hecho tan terrible como tu ausencia puedan surgir cosas tan maravillosas.
Me gusta imaginar que a aquellos enfermos a los que les regalaste esperanza comparten contigo un espacio en este mundo, que tú a través de sus cuerpos vives vidas distintas cada día. Me gusta imaginarte visitando más lugares de los que ninguno de nosotros podría visitar jamás. Me gusta pensar que sentirás de alguna manera miles de sentimientos distintos e ilimitados porque no se si un pedacito de ti está dentro de un niño o una niña. Y me gusta imaginar que aprenderás muchas más cosas de las que yo podría en lo que me resta de existencia. Estas personas aunque nunca te hayan conocido, te estarán eternamente agradecidas y yo le doy las gracias a tus padres por este gesto de amor desinteresado que otorga vida y felicidad a otros padres y restablece cada día mi fe en la bondad de las personas.
¿Sabes? Cuando uno se va haciendo mayor suele perder contacto con los amigos de la infancia, la cotidianidad es cruel y se encarga de ello, pero yo he visto como cada domingo se reúnen tus amigos en nuestra casa para marchar a la tuya, unidos como un ejercito de alegría con la meta de arrancarle una carcajada a tu hermana, propagando el amor que les infundas e inundando de risas y juventud tu casa para invocarte y que tus familiares se sientan protegidos. He sido partícipe de como la alegría compartida crece y he visto como se reparten entre todos el dolor para hacerlo desaparecer aunque sea por lo menos un día. Y te doy las gracias Anna por recordarme que cada día tengo que procurar decirle a quienes amo, cuanto los amo y vivir con la esperanza de que ellos no me olvidarán cuando yo ya no pueda hablarles, como tus amigos lo hacen contigo.
Tengo muchos héroes, desde la infancia hasta ahora, personajes de ficción y gente real que he conocido únicamente por libros. Pero gracias a ti, hoy tengo la fortuna de poder decir que conozco héroes de carne y hueso, gente de una fortaleza de hierro, sincera, humilde, sencilla y clara, blanca como la nieve que hoy caía en Cavallera. ¡Tu familia es hermosa! y estoy segura que estos 12 años que compartiste con ellos fuiste más feliz que muchas personas que viven 80 años sin llegar a conocer el amor verdadero ni valorar la fortuna de pertenecer a un hogar. Hoy compartimos mesa en tu hogar, un paraíso inmaculado frío y tan cálido a la vez, donde reímos y jugamos y sentimos tu presencia. No opacabas nuestra felicidad porque tu misma eras el motivo que nos impulsaba a ella y por eso Annita te doy gracias infinitas porque me has enseñado que SI existe VIDA después de la muerte y esta noche , por fin , ya no tengo miedo.
T'estimo perquè l'amor per tu que desprèn la meva família catalana se m'encomana cada día.
Gracias Anna, por tus enseñanzas.
Hola Anna,
Son las 12 de la noche del domingo 28 de abril, hoy pasamos un día muy lindo en compañía de tu familia y quería compartir unos pensamientos que al regresar a casa me rondaban por la cabeza.
Siempre había tenido miedo de morir y siempre me había preguntado si es que existe vida después de la muerte...
Desgraciadamente te conocí por muy poco tiempo pero veo el legado que dejaste en el corazón de dos nenas fantásticas a las que quiero mucho y en el hombre que amo y me sorprende que de un hecho tan terrible como tu ausencia puedan surgir cosas tan maravillosas.
Me gusta imaginar que a aquellos enfermos a los que les regalaste esperanza comparten contigo un espacio en este mundo, que tú a través de sus cuerpos vives vidas distintas cada día. Me gusta imaginarte visitando más lugares de los que ninguno de nosotros podría visitar jamás. Me gusta pensar que sentirás de alguna manera miles de sentimientos distintos e ilimitados porque no se si un pedacito de ti está dentro de un niño o una niña. Y me gusta imaginar que aprenderás muchas más cosas de las que yo podría en lo que me resta de existencia. Estas personas aunque nunca te hayan conocido, te estarán eternamente agradecidas y yo le doy las gracias a tus padres por este gesto de amor desinteresado que otorga vida y felicidad a otros padres y restablece cada día mi fe en la bondad de las personas.
¿Sabes? Cuando uno se va haciendo mayor suele perder contacto con los amigos de la infancia, la cotidianidad es cruel y se encarga de ello, pero yo he visto como cada domingo se reúnen tus amigos en nuestra casa para marchar a la tuya, unidos como un ejercito de alegría con la meta de arrancarle una carcajada a tu hermana, propagando el amor que les infundas e inundando de risas y juventud tu casa para invocarte y que tus familiares se sientan protegidos. He sido partícipe de como la alegría compartida crece y he visto como se reparten entre todos el dolor para hacerlo desaparecer aunque sea por lo menos un día. Y te doy las gracias Anna por recordarme que cada día tengo que procurar decirle a quienes amo, cuanto los amo y vivir con la esperanza de que ellos no me olvidarán cuando yo ya no pueda hablarles, como tus amigos lo hacen contigo.
Tengo muchos héroes, desde la infancia hasta ahora, personajes de ficción y gente real que he conocido únicamente por libros. Pero gracias a ti, hoy tengo la fortuna de poder decir que conozco héroes de carne y hueso, gente de una fortaleza de hierro, sincera, humilde, sencilla y clara, blanca como la nieve que hoy caía en Cavallera. ¡Tu familia es hermosa! y estoy segura que estos 12 años que compartiste con ellos fuiste más feliz que muchas personas que viven 80 años sin llegar a conocer el amor verdadero ni valorar la fortuna de pertenecer a un hogar. Hoy compartimos mesa en tu hogar, un paraíso inmaculado frío y tan cálido a la vez, donde reímos y jugamos y sentimos tu presencia. No opacabas nuestra felicidad porque tu misma eras el motivo que nos impulsaba a ella y por eso Annita te doy gracias infinitas porque me has enseñado que SI existe VIDA después de la muerte y esta noche , por fin , ya no tengo miedo.
T'estimo perquè l'amor per tu que desprèn la meva família catalana se m'encomana cada día.
Gracias Anna, por tus enseñanzas.
Tania
